Sobre Dios y el amor propio
amorpropio
- Por Ana Listas

Sabes que has madurado un poquito cuando dejas de hacer cosas por obligación y escoges las que quieres hacer por voluntad.
Cuando cuestionas todo (desde tus hábitos hasta tus creencias), para tomar decisiones a partir de lo que te nace y no de lo que te inculcan. A partir de lo que crees y no de lo que quieren que creas.
Precisamente porque “tomar decisiones” es la verdadera definición de madurar… o de “ser un adulto responsable”.
Y aunque tu yo adolescente no lo pueda creer: es menos aburrido y más liberador de lo que te imaginas; especialmente porque la adultez viene con el importaculismo debajo del brazo.
El importaculismo que te da el hecho de serte fiel y no de ser un fiel juguete del qué dirán.
(Además la diferencia entre tu “yo” de hoy y tu “yo adolescente” es entender que era cierto eso de las etapas de la vida).
Y en mi lista de cosas que he empezado a hacer por voluntad (claramente porque ya he quemado otras etapas) están:
*Ir al ginecólogo. *Visitar a mi familia. *Pedir ensalada. *Leer por gusto. *Acercarme a Dios para tener mi propia versión.
Y en eso de acercarme a Dios, he vuelto a confirmar que “encontrar frases nuevas en canciones viejas” (como me ha pasado con muchas de las letras de Shakira) es la prueba de que hay cosas que has oído toda la vida pero realmente no las habías escuchado; simplemente, porque en ese momento no te pertenecían. Porque no tenían un mensaje para ti.
Me pasó hace poquito con una canción de misa (que por cierto confieso que me fascinan). Me quedé pensando en ese “no me habeís vosotros elegido, fui yo mismo quien os elegí”...
*Favor volver a leer despacio y consciente esa frase, porque sin importar tus creencias, te están diciendo “¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AMIGA, DATE CUENTA QUE TE ELEGÍ!!!!!!!!!!!”
En ese momento solo pude pensar: si Dios nos eligió, ¿por qué desconfiamos tanto de la elección de Dios?
Dudar de nosotros es poner en “tela de juicio” las elecciones de Dios… como si Él no fuera superior.
(Insisto: entiéndase como se entienda Dios; dese cuenta que no es cuestión de religión y que lo que le está queriendo decir es que su existencia no es simple coincidencia).
Por eso esa frase también de "Dios dijo: ama a tus enemigos, y empecé a amarme a mí mismo".
¿Cómo no amarnos si somos su elección?
En fin. Favor recordar esto cada vez que la vida no se sienta tan bonita.